Felipe Calderón gran visionario político poseedor de una gran óptica distorsionada, nos sorprende de un cinismo cargado ya de orden criminal, puesto que con un buen bonche de promesas de campaña olvidas entre ellas el desafuero político, el empleo, la migración, la pobreza extrema, el poder adquisitivo y reordenamiento económico tan necesario del país, en está semana se aventó dos declaraciones que no eran necesarias, la primera el decir que al señor le enfadaba que se dudará de las consecuencias del calentamiento global, ya que desde hace un tiempo en el transcurso del año,se ha puesto en duda si los temblores tanto el de Haiti como el de Chile hayan sido fenómenos de la natural terráquea, ya que Estados Unidos cuenta con unidad en Alaska, conocido como la investigación Harp que tenia como idea estudiar el desgaste de la tierra, pero que parece ser la principal sospechosa de provocar estos eventos, en los cuales tendríamos que contar con la catástrofe de de Veracrúz principalmente como de Oaxaca y Chiapas,con los cuales no ha habido ningún pronunciamiento gubernamental que anime a estas poblaciones en desamparo, siendo está situación de suma tristeza y de un muy alto riesgo para la seguridad nacional; por el otro lado se abrió de capa con un sentir que ha su apreciación es culpa de López Obrador pero que en certeza es culpa de él, para él López Obrador era un peligro para el país, como es para su óptica el principal culpable de odio y divisiones del país, el haya sido como haya sido fraude electoral, de alguna manera nuestro gran chaman político nos confiesa y no el fraude en contra del pejelarto, en un momento en dónde insisto es más apropiado un pronunciamiento gubernamental sobre los estados dañados, nos habla de un hombre peligroso y señala a una sombra que a pesar de volver a levantar la mano para una nueva candidatura electoral para el 2012, compitiendo con un carismático y televiso postal como el muñeco de Enrique el Gavioto Peña Nieto, y un Ebrard que pudiera basar su voto de confianza con las alianzas entre partidos completamente discordes para poder ganarle candidatura, y aunque y ciertamente falta tiempo Calderón le pone fuego y adelanta tiempos para su excesivo clientelísmo electoral basado en rumores, en muertos por el crimen incluso a inocentes, y en una paranoia sistemática que se desvanece en el anhelo de la justicia ante una impunidad tan grande como la nula aprensión al Chapo Guzman.
Felipe Calderón censura a López Obrador pero no censura a su gobierno incapaz de proporcionar seguridad a la nación y promoviendo las divisiones en el sentir del pueblo de una manera acosante y fracamente cínica...Pero con estas declaraciones deja claro su ascenso a la presidencia y de que modo.
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