Se anuncian siempre este dúo que vale la pena de calificar como dúo dinámico y músicos y artistas de altura, como rock de cámara siempre alienados y orientados al borde de la expresión cercando al art rock, rock progresivo, rock y jazz fusión y rock en oposición, mas lo que aparezca en el horizonte; desde la primera vez que los vi allá en del año 2000, cuando habían sacado su primer registro que tenía el nombre homónimo de la Perra, en un lugar llamado los Enanos del tapanco llamado así en honor a una famosa expresión que tenía el hoy finando ex presidente mexicano José López Portillo para tratar a su detractores, la Perra integrada por la mejor bajista mexicana Elena Sánchez y por el baterista Perico el payaso loco, ambos con antecedentes de haber integrado grandes propuestas de rock en México, Elena Sánchez estuvo en aquel mítico grupo femenino llamado: “Flor de Metal” que lamentablemente no paso de un solo registro en la época de la década de los ochentas, mientras que Perico fue integrante del hoy extinto MCC (Música de contra cultura) por mencionar algunos. En su presentación en el museo del Chopo nos demostraron ser una agrupación bastante profesional como lúdica, ya que supo integrar y formar un espectáculo interdisciplinario para poder lucir la música propia, y así lo hicieron ya que a mediados de su presentación involucran a un profesional de la danza que logra mostrarse ligero y entero en lo mejor de su expresión Dionisiaca danza, además que desde el principio se hicieron acompañar de un maestro en imágenes como lo es Manolo Garibay y el maestro en danza corresponde al nombre de: “Juvenal”. El espectáculo fue de primera y fue a todas luces un divertimento lúdico, con la buena interpretación tanto de Elena Sánchez como de Perico que logran hacer el dialogo interminable y genial entre el bajo y la batería, un espectáculo digno y genialmente repetible. Este espectáculo fue el viernes 27 de abril en el Museo del Chopo
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